Si se cumplen todos los pronósticos mañana podremos decir habemus nuevo Presidente del Gobierno de Canarias, bueno nuevo, lo que se dice nuevo no es, ya es su segundo mandato y sí Paulino Rivero ha sabido jugar muy bien, lógicamente el fin de los partidos es gobernar y como en Canarias un pacto PP-Psoe está lejos de hacerse realidad, Coalición Canaria saldrá siempre ganando, a no ser que se dignen a cambiar el sistema electoral canario, y que entre la democracia plena al Parlamento de Canarias. Tenemos que recordar que en 2007 ganó el PSOE y la presidencia fue para Coalición Canaria y el pasado mayo ganó las elecciones el Partido Popular y tendrá la Presidencia del Gobierno de Canarias Coalición Canaria.
Estamos ya en la VII legislatura de la democracia y han pasado desde el año 1982 siete Presidentes de Gobierno de Canarias diferentes y uno repetido (Jerónimo Saavedra) y ninguno ha sido criado en islas periféricas, sino en las islas que se llevan siempre el gran trozo del pastel, Tenerife y Gran Canaria, y la excusa de que es donde mayor población hay y por eso se invierte más, nos lo creemos una, dos y tres veces, ahora cuatro no. Es hora de apostar por las islas no capitalinas y dejar respirar de inversión a las islas capitalinas.
Islas como Lanzarote se han ido convirtiendo con el paso de los años en una de esas islas donde la inversión brilla por su ausencia y no sólo la inversión en infraestructuras sino en aspectos tan importantes como es la Educación y un campus universitario en condiciones, eso sí abriendo el abanico de la oferta educativa universitaria. Un futuro campus con las mismas titulaciones es tener a un mismo perro con distinto collar.
Hasta que no haya un Presidente o una Presidenta del Gobierno de Canarias de una isla no capitalina les puedo decir que no se sabrá que es la doble insularidad, y triple contando a la Graciosa. Un Presidente que haya sufrido y sufra la carestía de la cesta de la compra, que se tenga que trasladar para acudir a un especialista médico, que haya tenido que trasladarse a cursar unos estudios universitarios, que tenga que utilizar un medio marítimo o aéreo donde abandera el monopolio de las grandes compañías de transporte interinsulares...Hasta ese momento no habrá un Presidente que entienda la doble y triple insularidad.
Lanzarote merece aumentar el nivel cultural al igual que las grandes beneficiadas de Canarias; Doña Tenerife y Doña Gran Canaria. Y no doy con esto pie a la envidia de las mal llamadas islas menores, doy pie a que prevalezca la igualdad de condiciones, que prime la equidad. Les puedo decir que Lanzarote ha sido una isla seca de proyectos y reseca de inversión en los últimos 15 años.
Espero ver algún día, y espero que no sea en sueños a un Presidente del Gobierno de Canarias conejero pero de pura zepa, que haya sufrido lo que sufre un Lanzaroteño por vivir en una isla donde la gestión seria y responsable y el progreso ha ido mermando en los últimos años, amén de la belleza, la tranquilidad y el sosiego que caracteriza a Lanzarote, y el orgullo que siento de ser conejero.