jueves, 3 de febrero de 2011

Que mal tiene que estar la cosa

La cosa tiene que estar muy mal, con cosa me refiero a eso mismo que estas pensado, a la economía a los vaivenes que está viviendo España en los últimos años.
Yo siempre digo que la culpa de que el País esté sumergido en un pozo sin salida no la tiene el Gobierno pero por una sencilla razón ¿ustedes creen que al actual Gobierno Español le interesa que la economía no salga para adelante? Yo creo que no les interesa dar un paso en falso para perder los grandes sillones. Y claro está que nadie tiene la clave para salir de la crisis, muchos sabrán cuales son las vías para mejorar la economía a largo plazo, pero a corto plazo no lo creo.
Ustedes se preguntarán a que viene todo esto, pues viene a raíz de un acto que sucedió el pasado domingo por la mañana cuando un inmigrante que llevaba cuatro años en España saltó la valla que se encuentra en Ceuta para saltar a su país, Marruecos. Los Guardias Civiles se quedaron perplejos ante tal suceso, ya que lo lógico es que fuese al revés, que los inmigrantes entren a España. Desde 1992 la ola de inmigrante en España ha sido abismal y tan abismal que el 12% de la población en España es extranjera y estamos hablando de 5.000.000 de personas, y es que España ha presentado las mayores tasas de inmigración del mundo.
La pena tan grande es que saltar las vallas que se encuentran por ejemplo en Ceuta se convierte muchas veces en un suicidio ya que el alambrado está cargado de electricidad y con unas alambras cortantes
Omar Chuick se llama esa persona que luchó por hacerse un hueco en lo que ellos llaman el paraíso y nosotros llamamos España pero se ha visto truncado por la falta de previsibilidad económica en el País donde él pensó hacer su futuro y ayudar a su familia.
Tenemos que tener presentes que no podemos decir no a la inmigración porque nunca se sabe cómo podemos vernos, si es cierto que tiene que haber un filtro y la Unión Europea es la que tiene que meter mano a la inmigración y repartir esa mano de obra por los países de la Unión y facilitarle el acceso a un trabajo, ya bastante mal lo han pasado en su País, donde el sinónimo de libertad y democracia está en la censura más insólita de un diccionario gestionado por el autoritarismo.
Me da malestar escuchar que el trabajo de los Españoles, el trabajo de los canarios se los quedan los inmigrantes, una frase que en ésta época surge más que nunca, no se han preguntado que ¿será que exigimos mucho a la hora de encontrar trabajo?, decirles que el hecho de que la población inmigrante ocupe puestos laborales pocos deseables para españoles ha permitido que los españoles ocupen puestos más alto en la pirámide laboral, hay que criticar con fundamentos y es que la inmigración ha sido positiva para España por varias razones, entre las que se encuentran: La repercusión de afiliaciones a la Seguridad Social y por dato relevante decir que el 45% de las altas registradas en los últimos años correspondieron a trabajadores foráneos, la mitad del trabajo creado en estos años se ha visto beneficiado de los trabajadores extranjeros, y entre otras cosas más, está la increíble contribución al crecimiento del PIB, un 3.1% anual.
Señoras y señores la cosa está muy mal porque para que un inmigrante salga de España, cuando lo habitual es que entre es que algo malo está pasando.

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